La fiesta ilicitana del sello Kurtyshona Records se convirtió en un auténtico festival de Hip Hop como los de antaño. Reggae, rap y exhibiciones de Break y Street Football.


 Crónica y fotos por Tomás P.


La noche del 16 de enero arrancó muy fría. Algunos dijeron que Kulto Kultibo traían las bajas temperaturas desde Irún. Al principio, ambiente escaso y gente dispera en pista y palcos. Los deejays pincharon clásicos americanos: California love, Fast line, Still Dre… mientras, entre el público, ganas de demostrar a los artistas invitados que Elche siempre se queda en el corazón.

Brother Selecta comenzó su show cerca de la media noche, uno breve pero intenso. Underground donde los haya. Una suerte de combinación entre rap y reggae para transmitir al público en la que cada tema cuenta. Aunque la sala seguía a medio gas, y ello se tradujo en forma de nervios, lo cierto es que cargaron con el peso de abrir la fiesta, y no fallaron.

Debido a problemas técnicos que derivaron en retraso y falta de tiempo, se recortó el cartel, dando paso prematuro a Jonko y Arkano. Y los alicantinos saben de qué va el rollo. Caldearon el ambiente desde el minuto cero. Dieron en la diana. Pasado, presente y futuro suena como primer hit de la noche. Así fueron sucediendo los temas, acompañados de freestyles.

La voz de la sospecha y Clase preferente quedaron en segundo plano cuando los artistas decidieron rapear con el público a ritmo de: tú dime una palabra que yo te rapeo sobre ella.

La noche empezó a emitir calor. Llegó el momento de la Rock Six Tenz, donde una decena de breakers, entre ellos una Bgirl, crearon un corro en la sala para hacer las delicias del respetable. Además, los Alicante Street Soccer realizaron auténticas virguerías con el balón encima del escenario.

El Tete de Elche, sin cambiarse después del show de freestyle con el balón, se empuñó un micro. Dj Tempo cogió los vinilos y Kurtys Flow y Kraken le acompañaron. El periódico y otros temas consiguieron -ahora sí- que el público se atreviese a corear a los artistas. Kraken agarró la guitarra y mezclaron beats en los plásticos con sesiones en acústico, Ras Makka y Andrés Gómez subieron para completar el show. El Tete también tiró de free para no perder la costumbre.

Kulto Kultibo se pusieron el mono de trabajo e hicieron que la sala se viniera arriba. Interactuaron con el público, consiguieron que la gente corease estribillos… Un show de sangre caliente para los artistas de la frontera.

Dj Cot salió a escena, el público se amontonó mientras Tosko tomaba el escenario. Recordando temas de su Lady Vida (2011) elevó la emoción del público a los niveles más altos de toda la noche. Las cuerdas vocales sangraban, y la sala reventó cuando el madrileño decidió cerrar con Soñar. Flow, calidez y mucha energía.

En definitiva, QUEDA2 consiguió su objetivo, que el hip hop del levante alicantino volviese a demostrar unión.

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